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Programa Micocyl

En un emocionante comienzo de la temporada micológica con las precipitaciones que se han acumulado durante el mes de septiembre, los amantes de las setas ya se preparan para la próxima fructificación de setas en el Parque Micológico Montes del Noroeste Zamorano. Entre las más de ochocientas especies de setas que se pueden identificar en la provincia de Zamora se encuentra la codiciada Amanita Caesarea, una seta conocida por su sabor delicado y su distintiva apariencia naranja, con preferencia por los terrenos silíceos y bosques aclarados, encontrándose principalmente bajo alcornoques, encinas, robles o castaños y con diferentes nombres dependiendo del lugar donde nos encontremos (oronja, amanita de los césares, huevo de rey, yema de huevo, gorringoa, kuletoa, ou de reig, araiña, etc.). El Parque Micológico Montes del Noroeste Zamorano, con sus densos bosques y su entorno natural excepcional, se ha convertido en un destino de elección para quienes buscan recolectar esta seta y explorar la diversidad fúngica de este territorio.

Tradicionalmente se describe una posible confusión de la Amanita caesarea con la Amanita muscaria (la seta de los enanitos), pero sus diferencias son muy evidentes. La característica inconfudible entre ambas es que tanto el pie como las láminas de la Amanita caesarea son de color crema intenso mientras que en la Amanita muscaria siempre son blancos. La Amanita muscaria tiene volva verrugosa, no membranosa y una cutícula roja con numerosos restos blancos, pequeños y verrugosos, y no, naranja, lisa y estriada como la Amanita caesarea.

Es importante recordar que la recolección de setas debe llevarse a cabo de manera responsable y respetuosa con el entorno natural, con un permiso de recolección de setas en las zonas acotadas y atendiendo a la normativa regional. Según el Decreto 31/2017, de 5 de octubre, por el que se regula el Recurso Micológico Silvestre en Castilla y León, en el caso de la Amanita caesarea, sólo es recolectable con volva completamente abierta y con el anillo roto, prohibiéndose su recolección y comercialización cerrada o en huevo, independientemente de su tamaño.

Desde el programa Micocyl recomendamos respetar la normativa micológica y practicar una recolección responsable. En caso de duda en la identificación, consultar con micólogos experimentados para garantizar una recolección segura.